Jeremías Gamboa, Contarlo todo, Random House, 2013 [Tout dire, Seuil, 2016, 528p., 24 €]
Una novela refrescante como una buena cerveza en el malecón de Miraflores una calurosa tarde de verano.
Contarlo todo es una novela del autor, periodista y profesor peruano Jeremías Gamboa que llama la atención de entrada por su carácter metaliterario, un escritor liberándose del terror de la página en blanco para, más que contar, desahogar “su historia”, como una liberación urgente y necesaria. Se ha puesto hincapié en su carácter autobiográfico, ya que la biografía del autor confirma algunos de los elementos narrados. Este relato también resalta por su “honestidad” la de un joven escritor, el narrador-protagonista que, en una especie de confesión auténtica y nerviosa, nos hace testigos de su iniciación a los submundos culturales, sociales y amorosos de la contrastante capital de Perú
Contarlo todo, cuenta con elementos que hacen el deleite del lector: en primer lugar, un deseo morboso de contar, como su nombre lo indica, contar todo, vivencias, reflexiones, datos cultos o banales o de actualidad, todo quiere transmitir el indiscreto narrador a un no menos morboso lector que lo recibe con deleite. Esto sin faltar ese sabroso estilo de narrar entre solemne y bromista que encanta en figuras ya consagradas como Mario Vargas Llosa o talentos más jóvenes como Santiago Roncagliolo. El escenario de la novela: la caótica realidad de la Lima de los años 90, donde la corrupción flota libre en el aire ante la indiferencia cotidiana de la alta sociedad el violento combate de la guerrilla, entre estudiantes estirados o incomprendidos, poetas notables y mediocres y un periodismo combativo o complaciente.
Entre los corredores de la aséptica Universidad de Lima y los bulliciosos y surrealistas espacios de revistas, periódicos y publicaciones cotidianas, entre otros lugares reales e imaginarios de esta ciudad de Perú, Gabriel Lisboa, un joven tímido y timorato, pero con un hambre de aprendizaje que lo impulsa a abrirse camino, madurará a través de las páginas de la novela hasta convertirse en un hombre cabal y un escritor. El paralelismo entre la evolución del protagonista y de su proceso creativo nos confirma que Contarlo todo es una novela escrita con nervio y una gran corrección. El aprendizaje del protagonista por la vida, va de la mano con una amena explicación del proceso literario y de la escritura y eso, deja al final al lector con una sensación de haber participado también de ese aprendizaje y con unas ganas urgentes de escribir.
Violeta Lemus Martínez